La vida del artista

Te encontré por azar
Aquí, allá o en otra parte,
Es posible que aún te acuerdes.
Sin conocernos nos amamos,
Y aunque no sea cierto
Hay que creer en la historia antigua.
Te ofrecí lo que tenía
Con qué cantar, con qué soñar,
Y tú creías en mi bohemia,
Pero si a los veinte pensabas
Que se podía vivir del aire,
Tu punto de vista ya no es el mismo.
Aquel hambriento fin de mes
Que desde que éramos tú y yo
Se repetía siete veces a la semana
Y nuestras noches sin cine,
Y mi éxito que no llega,
Y nuestra comida incierta.
¿Lo ves? No he olvidado nada
En este oficio triste hasta las lágrimas
Que constata nuestra derrota.
Aún quedan hermosos días,
Aprovéchalos, mi pobre amor,
Los bellos años pasan pronto.
Y ahora te marcharás,
Los dos envejeceremos
Solos, qué triste.
Puedes llevarte el tocadiscos
Yo conservo el piano,
Continúo mi vida de artista.
Más tarde, sin saber por qué
Un extraño, un infeliz
Al leer mi nombre en un cartel
Te hablará de mi éxito,
Pero un tanto triste tú, que lo sabes,
Le dirás que a mí me da igual,
Que a mí me da igual…


De Leo Ferré.

Quiero acabar con este sábado...y comenzar la mañana del domingo...siendo inconsciente de lo que me depara esta noche...fría...acurrucada...y fuera de las calles por decisión propia...Comienzo con el vicio...abro la ventana...enciendo una vela...y respiro el humo del cigarro...Lejos de aquella pared que me apoyaba, sí, ella, me apoyaba...hace una semana...aquellas miradas...y esas ganas de probar...quiero acabar con este sábado...

Entrada 109

Alzaron la voz y maldijeron el día...Se sentaron ambos...se miraron y se convirtieron en sombras...el pasado los ocultaba...y el presente los matizaba...

Gris...un claro oscuro...tinta y pinceles...un cuadro, tres historias...una escena...y diferentes fines...pero con brochadas de mismas tonadas...

Ella y él...retratos en movimiento...se enfrentaron...se tomaron las manos y se pararon...se miraron y ambos vieron su propio reflejo...Se asombraron y se echaron para atrás...

Miedo y temor de leerse en las letras del otro...maldijeron una vez más...y las facciones de ella quedaron paralizadas...

Existió la mano que unió y que hizo revivir su historia en la piel de él...

Volvió a sentir el temblor de los labios que iban a proclamar un último suspiro de dolor...cayó de rodillas y habló...lloró...la sujetó de las piernas y...

El pintor...con brocha en mano, paró la escena...sedujo el lápiz en el caballete...y dijo: Pasen los siguientes...

(Iba a haber una entrada 109 privada...creo que dejaré de dibujar esa escena...y seguir tapándola con colores...así es más fácil)

Noches desnudas

Comienzan las noches de camas compartidas...fugaces...de brazos por horas...de intensidad momentánea...

Buscando una cama para dos...en noches que cubran necesidades saciables de corazones marchitos...

"No sentir nada...es casi peor que sentir demasiado...

y el miedo a fallar, hace que evite jugar..."

"the love cave beetwen my legs"

Algo que me robó una risa...usaré esta expresión ;)

Respirar profunnnnnnnnnndo

y dejar de ahogarme con mi propio aire...con el de mi imaginación que invade cada poro...me asfixia y me hace sentir cada parte de mi torax...

abro los pulmones...cierro los ojos y me desprendo de crear imágenes que yo hubiese vivido en alguna situación que me inventase...

tanto por contar...por dar...

La vuelta a atrás

Recogió sus papeles del escritorio. Abrió el libro y volvió atrás en el tiempo. Cerró los ojos y recordó la textura de aquellas letras. Posó las yemas para sentir los relieves del papel y los huecos hechos con colores. Pintó una sonrisa y contó una lágrima. Dejó de pensar y comenzó a sentir. Necesitaba la libertad en su cuerpo y la soledad de la habitación. Se despojó de lo que la unía a las telas que la recubrían, los accesorios y el maquillaje. La habitación en penumbras. El piano y aquellas partituras de la amargura. Un cd de aquellas canciones que la llevaban a profundizar. En la soledad de estar rodeada por el mundo...de ser una exquisita pieza social. Encendió un cigarro...puso la boquilla en sus labios. Y al compás de un 2x4, buscó el teléfono de aquel amor que yacía lejos. Las cuatro de la mañana y el wisky en sus venas. Los violines rayaban las rugosidades de su piel. Un momento de silencio. Sentarse frente a un gran espejo. Tomar una hoja y sus carbones...y autoretratarse...pero...mirándo a aquella mujer que fue cuarenta años atrás...



(Sin saber cómo...las piezas se unen solas...mi mente recrea cosas y mi alma me usa como corresponsal en la Tierra.

Días en las que las fronteras de las dimensiones se hacen frágiles...y las almas se unen a pesar de estar los cuerpos lejos...La diferencia de estar en un plano u otro, son los impedimentos y excusas que nos creamos para las distancias. Pero la pureza del espíritu que llevamos dentro, trata de huir ...y seguir puro...sin los karmas que le vamos generando...

Traté de dormirme temprano...además de que el cuerpo lo requería...mis ojos se cerraban solos, luego de una noche llena de lágrimas, llena de aquellas sensaciones que vivo una vez al mes...y que la sensibilidad me envuelve en contornos muchas veces provocados. Espero que mi alma se haya unido a quienes deseaba ver...mientras yo yacía inconsciente del al rededor. )