martes, 13 de octubre de 2009

La sobredosis para el final...

Se sentó. Miró el reloj y supo que su tiempo había concluido...Bang ...cayó una silla...y el estrundo de las ondas vibracionales recorrieron su oído...y un sobresalto lo hizo levantarse. Comenzó a caminar por todo el salón...el tic tac de su corazón iba en aumento...sí, tic tac...la poca cuerda que quedaba de aquel músculo ya debilitado de la sobredosis de medicación...de los excesos de alcohol...y los millares de días en soledad... PUMM ...se oyó desde otra habitación...Su palpitar empezó a ir acorde a la rapidez del segundero...El cronómetro estaba listo para ser activado...solo faltaba la decisión...ó simplemente el impulso...con sobredosis de realidad...escuchó el llamado hacia el comienzo del final...


BO0MMMMMMMMM

Esto es lo que hay.

Él oyó aquella voz...abrió las cortinas...se recostó sobre su cama...miró hacia el techo y concluyó que era momento de seguir viaje...y dejar todo aquello que lo atormentaba...no lo beneficiaba...Se decidió a ponerse en pie. Tomo su sombrero, su equipaje y su piloto. Pasó por la chimenea. Dejó la carta del por qué...y dijo adiós.

Desapareció sin más...desapareció sin menos...

Cambios de aires...cambios de sobredosis...

A veces, la realidad nos supera...y la tolerancia se acaba.

1 comentario:

  1. La fina linea de la tolerancia y la comprension dependera del lado por el que se mire...

    besotes de esta peke.

    pd. te espero por mi rincon con una taza de cafe, siempre que quieras...

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